En el mundo de los productos ecológicos, las etiquetas pueden ser confusas. Términos como “biodegradable”, “ecológico” o “verde” se usan con frecuencia, pero no siempre significan lo mismo. En un mercado lleno de “greenwashing” (o lavado de imagen verde), saber el verdadero costo del “bio” es clave para tomar decisiones que realmente beneficien al planeta.
Más allá de la palabra “biodegradable”
La mayoría de los productos son biodegradables, si se les da el tiempo suficiente. Incluso una botella de plástico eventualmente se descompondrá en pequeños fragmentos después de cientos de años. El término, por sí solo, no garantiza que un producto se desintegre en un tiempo razonable ni que no deje residuos tóxicos. La verdadera pregunta es bajo qué condiciones y en cuánto tiempo se degradará.
La clave es la palabra “compostable”
Aquí es donde entra en juego el término compostable. Un producto compostable es uno que ha sido certificado para descomponerse en sus elementos orgánicos en un tiempo específico (generalmente 90-180 días) en las condiciones adecuadas de una planta de compostaje, sin dejar residuos perjudiciales. En Vida O, nuestros productos no solo son biodegradables, sino que están diseñados para ser compostables. Están hechos de materiales vegetales como el bagazo de caña y la fécula de maíz, que la naturaleza reconoce y puede procesar eficientemente.
Tres preguntas clave antes de comprar
Para no caer en la trampa de las etiquetas engañosas, te ofrecemos una guía simple. La próxima vez que vayas a comprar desechables “verdes”, hazte estas tres preguntas clave:
1. ¿De qué está hecho? Los mejores productos sostenibles están hechos de recursos renovables y no de derivados del petróleo.
2. ¿Dónde se degrada? Asegúrate de que las condiciones de degradación sean realistas. Los productos compostables funcionan en plantas de composta.
3. ¿Tiene certificaciones? Busca sellos de organizaciones reconocidas que certifiquen el producto como compostable, esto te dará la garantía de que ha pasado por rigurosas pruebas.
El verdadero costo del “bio” no se mide en el precio, sino en el impacto. Al elegir productos genuinamente compostables, como los de Vida O, estás invirtiendo en un futuro limpio, libre de plásticos y lleno de vida.